_______________________________________________________________________ /* ATDT MAGAZINE :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::: :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::: ::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::[0x03-05]: NUMERO 0x03::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::: "todo es modo texto" por gabochi */ 111..1..11...1.....111..11.....111.....111..1.. .1..1.1.1.1.1.1....11...1.......1..1.1..1..1.1. .1..1.1.1.1.1.1....1.....1......1...1...1..1.1. .1...1..11...1.....111.11.......1..1.1..1...1.. DISCLAIMER Este título es un bitmap, cada letra son 16 bits. Falta la segunda "E", la correspondiente a "TEXTO". No sólo la satisfacción de entender por qué fue "sacrificada" sino todo el universo de significaciones que saber por qué despierta, es la cuestión de este aporte. Sin embargo, por qué es la "E", precisamente, que al mismo tiempo "falta" y "sobra", quizás resulte menos evidente para quienes me leen ahora. Esa es una puerta a otro universo, con el que nos vamos a mezclar. TODO ES TEXTO Hay una frase muy conocida de Jacques Derrida que dice "todo es texto". Por eso, como este es un medio donde ciertamente valoran al texto, quisiera explicar un poco qué significa e insistir sobre algunas características del texto relacionadas con la cultura digital y este formato específico. Una referencia obligada en todo esto es el lingüista Ferdinand de Saussure (1857-1913). Específicamente su observación de cierta dualidad: significado/significante. Por lo menos hace 2500 años que existe una discusión acerca de si las palabras tienen una relación con aquello que "significan". Eso es lo que evoca Borges en ese genial preámbulo de su Gólem: "Si (como afirma el griego en el Cratilo) el nombre es arquetipo de la cosa en las letras de 'rosa' está la rosa y todo el Nilo en la palabra 'Nilo'". El Crátilo es un diálogo platónico donde se discute esta cuestión. En fin, lo que importa es que Saussure dice que NO. Para satisfacer los requerimientos de un objeto científico, su lingüística intenta ser un análisis formal del sistema de significantes, de su "materialidad". Y, para él, estos significantes son accidentales, no tienen relación con el significado. Es más, al no existir una relación necesaria entre el signi- ficante y el significado, este último depende de la disposición subjetiva de quien lo lee o lo escucha, por eso lo primero que hace Saussure es extirparlo de su disciplina.* Lo que vamos a conservar de todo esto es que la lectura, la audición, en definitiva cualquier experiencia, es significante, es interpretativa. Hay que decir, también, que Derrida leyó bastante a Heidegger y seguro que no le pasó desapercibido cuando habla exactamente de lo mismo: la experiencia es, necesariamente, interpretación. Cualquier experiencia subjetiva lleva implícita la estructura de una pregunta. Por ejemplo ¿qué pasa? ¿quién soy? etc. O sea que "todo es texto" es como decir "la vida misma parece responder a las características del texto como, por ejemplo, la interpretación". Contrariamente a lo que sueñan muchas utopías, no podemos tener una experien- cia "insignificante", no podemos "vaciarnos" completamente de prejuicios, referencias, remitencias, vínculos, etc., porque no somos sino una memoria de una red de este tipo. Tal cosa no sería en rigor una experiencia, es algo pre-subjetivo, no en el sentido de que es "anterior" o "indiferente" digamos, "materialmente", a lo subjetivo, ni siquiera sería objetivo ya que los objetos tienen que satisfacer por definición estructuras subjetivas. "Pre-subjetivo" quiere decir que no hay sujeto en esa "cosa". Con esta peculiar aclaración nos acercamos a las paradojas del texto, veamos. LA NO-COSA-EN-SÍ PERO SÍ-COSA-EN-NO, DOBLE NEGACIÓN NO EXPLICADA Hace un instante dije "cosa" para referirme a ese imposible pre-subjetivo. Es que ¿cómo puedo siquiera nombrar, puesto que nombrar es una acción con sujeto, lo innombrable? ¿qué estoy imaginando cuando digo "esa no-cosa inaprehensible por la imaginación?". Para Kant, por ejemplo, para Widgenstein podríamos afirmar que también, "God is in his heaven, all is right with the world". Está lo que se puede decir y lo que no, lo que se puede saber y lo que no, etc., y cada cosa en su lugar. No es el caso de Hegel ni de Derrida (aunque quizás a ambos les daría una especie de escalofrío profesional al encontrarse en la misma oración compartiendo algo). Descartes decía que la prueba de que Dios existe es que podemos pensar en Dios y, dado que tiene que existir una correspondencia entre el efecto y la causa, el pensamiento de Dios, algo que nos superaría como causa, ha de haber sido insertado por Dios mismo de manera artificial en nuestras mentes. En términos menos teológicos, lo infinito, lo imposible y todas esas "cosas", irrumpen en el sistema aparentemente posible y finito en forma de contradicciones, paradojas, inconsistencias, "residuos" o "errores". Es la misma cualidad ontológica de otro in-, el inconciente y otras referencias obligadas de Derrida son sin duda Freud y Lacan. Como parada intermedia, antes de llegar a la cuestión del texto digital, veamos la metáfora topológica que elige Lacan para hablar del sujeto: la cinta de Moebius. Yo creo que estos imposibles irrumpen también en aquellos lugares supuestamente ascépticos, generando asombro sublime y respuestas elegantes. La cinta de Moebius es una superficie con una sola cara, el tema es que nos resulta contraintuitiva. Si viajáramos derecho por la cinta, pronto nos encontraríamos en el mismo punto de partida pero como si nos moviéramos inversamente a como salimos. Esta cinta tiene un montón de propiedades interesantísimas. Por ejemplo, cuando vemos su representación tridimensional, parece por momentos que hay un afuera y un adentro, un reverso, cuando no lo hay. Esto le gustó a Lacan para explicar cómo la intuitiva "discontinuidad" entre el conciente y el inconciente no existe. MUCHO MÁS QUE UN MALESTAR EN LA CULTURA DIGITAL Por fin, vamos al punto. Existe una concepción naturalmente represiva de esta continuidad abismática. Es cierto que hay un mínimo necesario de supervivencia y convivencia social, es decir, sin duda existe algo así como "el malestar en la cultura digital" que esquiva el horror y es aceptable. Pero el tema es cómo hace máquina con la pulsión capitalista de muerte. La red significante es más fuerte y profunda en los accidentes, en los márgenes, en un charset, una "anomalía" o arbitrariedad cualquiera. Toda la historia, toda la cultura, todo el texto vivo, la lengua informática materna se niega. El "realismo" cada vez más exasperado de las interfaces y la aceleración absurda y obligada del hardware consideran a todas las irrupciones de lo infinito no solamente prescindibles sino indeseables, han de ser "superadas", destruídas. Si lograran finalmente hacerlo, destruirían con todo eso a la cultura, a la historia, al sujeto informático. Un hacker comprende el valor de los "errores" pero también cualquier persona que disfruta del ASCII, el PETSCII, el pixelart, el chiptune, lo que sea, esa persona puede tener una experiencia estética que, es necesario insistir, no es "retro" ni "nostálgica", esas son las categorías represivas que buscan pasteurizar el valor, la tragedia, la belleza que estas expresiones tienen en sí mismas. Estas formas verdaderas del arte y la cultura digital están erotizadas, establecen un vínculo de intimidad con la tecnología que se opo ne a la idea de la computadora como mediador evanescente. Hans-Georg Gadamer, discutiendo con Derrida, una vez le dijo que en el texto había elementos secundarios, descartables, cosas que evidentemente podían suprimirse en virtud del significado. Pero "todo es texto" significa que cada elemento es relevante; claro que muchos neófitos vanidosos se frotan las manos ante tanta dispersión ambiguatoria, también hay policías que quieren suturar los significantes con moralismos PERO los filólogos saben que una coma es como un agujero negro que puede hacer naufragar cualquier traducción más allá del horizonte de eventos. Lo mismo es un bit, otra aparentemente insuficiente dualidad, de donde nacen todas las fantasías. * El caso de la programación sería algo excepcional de identidad entre la palabra y su 'significado'. En rigor, no son 'palabras' sino instruccones. No existe propiamente hablando ningún 'lenguaje' de programación. Incluso en relación con el Gólem, se ha señalado la similitud entre la programación y la magia. gabochi mail: gabriel.vinazza@gmail.com instagram: @gabovinazza ________________________________________________________________________ !EOF -> atdt-zine-0x03-05.txt